LOS "GARGANTA PROFUNDA" EN LA ERA DIGITAL

Por JAIRO RAMÍREZ 

Mark Felt: el testigo de Watergate que atormentó a Richard Nixon

En mi primer post, quise inquietar a mis lectores para irlos comprometiendo con este ambicioso proyecto periodístico. Y aunque la revolución digital apenas comienza, ya vislumbramos de qué manera estrechará  la relación entre el periodista y sus lectores, hasta el punto en que sus roles a menudo se confundirán. Las tecnologías de la información y la comunicación, harán que el ciudadano del lugar más remoto, incluso aquel que viva en la profundidad de la selva, se pueda convertir en un oportuno reportero de cualquier suceso noticioso. Sus herramientas de uso diario, como el teléfono móvil o una sencilla cámara digital, pueden constituirse en  un instrumento valioso para divulgar cuanto suceda en su región, todo cuanto pueda afectar a su comunidad. Ese reportero ciudadano tendrá el privilegio de ser un testigo de excepción, que le permitirá suministrar una información más precisa, más confiable y más inmediata a la sociedad.

Este blog, pretende estimular en Colombia un modelo de periodismo colaborativo, gestionado por los  propios ciudadanos, totalmente interactivo, utilizando todos los recursos multimedia que tenemos en la web. Fui Testigo es una invitación al desahogo, pero no sólo al deshago de todo aquello que se nos atraganta relacionado con crímenes y corrupción, tragedias y malas noticias, sino también al desahogo de infinidad de cosas agradables, trascendentales y de gran valor para la humanidad, y que no han sido divulgadas porque no se ha tenido la oportunidad.

Hoy, gracias a la web 2.0,  no sólo tenemos la oportunidad de divulgar cuanto conocemos, sino también la de entablar debates e interactuar con quienes las pueden conocer, con científicos, con académicos, con estudiantes, para enriquecerlas y compartirlas. Así como ante nuestros ojos ocurren los hechos más patéticos, también somos testigos a diario de grandes obras humanas que alegran nuestra existencia y que deben darse a conocer. En las universidades -las grandes universidades- todos los días se produce conocimiento valioso que debe socializarse.

Y un impacto trascendental en las fuentes oficiales producirá -sin ninguna duda- el periodismo gestionado a través de la internet, con miles de ojos y oidos vigilantes, con Ipods, móviles, cámaras digitales, memorias USB y ordenadores regados en cada rincón del poder, con herramientas virales tan poderosas como Facebook y Twitter, con testigos alertas en cada oficina, entonces es claro que las fuentes oficiales tendrán que hacer un esfuerzo mayor para tapar, tapar y tapar, porque los testigos están en todas partes, incluso en las propias entrañas del poder.

Mark Felt, aquel testigo inmortal que atormentó a Richard Nixon con el escándalo de Watergate, ha dejado su impronta para que otras generaciones de "Garganta Profunda", como sujestivamente se apodó a Felt, sigan su ejemplo, esta vez ayudados por una tecnología insospechada. Y gracias a la facilidad que ofrece esta tecnología sencilla, los "garganta profunda" de hoy estarán más estimulados a compartir cuanto saben. 

Y ustedes, apreciados cibervisitantes, también pueden y deben hacerlo. Ser testigo de algo es una experiencia excepcional, privilegiada, en tanto pone a prueba toda nuestra condición humana, nuestras posibilidades de reacción ante un acontecimiento. Y podemos ser indiferentes o solidarios, partícipes o apáticos, protagonistas o simples espectadores, podemos ser sordos y guardar silencio, incluso mirar para otro lado. En fin, podemos ser humanos o convertirnos en rocas. Pero en Fui Testigo no los queremos indiferentes; este blog desea que ustedes sean protagonistas de primera mano...